Diego Veras, el gurú del pan, es una de aquellas personas que vale la pena conocer. Su pasión por el pan, sus secretos y su magia, puede hipnotizar a cualquiera. Nos conocimos cocinando en "La Noche del Pavo" y desde ese momento seguimos en contacto unidos por nuestro interés común en la cocina y sus poderes. Él es un cocinero profesional, nada improvisado, cuya pasión está en la creación de los mejores panes que existen en el planeta.
El martes de esta semana logramos coordinar nuestras agendas para juntarnos en casa y, con suma paciencia, Diego me abrió las puertas al mundo del pan. El objetivo: pensar en pan, entender su magia y esencia para poder crear cualquier pan que se me ocurra. En este primer encuentro, me limité a observar y escuchar. Intenté amasar pero, por sobre todo, logré engancharme en este nuevo mundo. Desde ese momento, estoy ansiosa por comenzar a experimentar creando mi primer fermento natural.
Amasamos un pan de centeno al que le agregamos nueces, almendras, manzana rallada, miel y aceite de oliva. Un pan denso pero suave, repleto de un intenso sabor irresistible para quien lo pruebe.
El segundo pan que amasamos fue un Brioche au Levain. Un placer amasar este pan, sentir su aroma y luego de hornearlo, disfrutar de su consistencia liviana y dulzona. El rey de los panes, en mi opinión.
Así comenzó mi experiencia de pan. Mi compromiso: experimentar hasta entender la esencia del pan y poder crear mis propios panes. El empujón ya me lo dió Diego, ¡ahora a jugar! Gracias, Diego.